Gran Premio de Singapur: El fin del dominio de Red Bull

Las expectativas para el Gran Premio de Singapur ya eran altas desde el principio, pero el resultado las superó con creces. Podemos afirmar que fue una de las carreras más emocionantes de la temporada; el Circuito Urbano de Marina Bay, como de costumbre, no defraudó y estuvo repleto de drama y acción.

¿Ha vuelto Ferrari?

Desde las sesiones de práctica, ya se vislumbraba que Ferrari contaba con un ritmo formidable, liderando las tablas de tiempos en cada ocasión. Red Bull estuvo experimentando con distintas configuraciones el viernes y el sábado, así que no se tenía certeza sobre cuánta velocidad podían alcanzar realmente. Sin embargo, llegó la clasificación y, para sorpresa de muchos y deleite de los detractores de Red Bull, ambos coches no lograron superar la Q2.

A lo largo de la temporada, Sergio Pérez ha experimentado varios contratiempos en la clasificación. No obstante, resultó sorprendente que ambos coches quedaran fuera de la lucha por el top 10. Aún más impactante fue que Max Verstappen fuera eliminado en la Q2 por Liam Lawson de Alpha Tauri, quien accedió a la Q3 en tan solo su tercer Gran Premio del año.

Con los Red Bulls fuera de combate, nos aguardaba una emocionante clasificación que, finalmente, tuvo al español Carlos Sainz Jr. en la primera posición. El otro puesto de primera fila fue para George Russell, quien podría haber superado a Carlos; sin embargo, consiguió situarse entre los dos Ferrari. Menos de 0,080 segundos separaron a los tres primeros pilotos.

Un comienzo de carrera ajetreado

Es complicado adelantar en este circuito, por lo que los resultados de la clasificación resultaban esenciales para la carrera. Durante todo el fin de semana, Red Bull tuvo problemas de agarre. Aunque no se puede descartar a este equipo, desde las primeras vueltas se percibía que no estarían tan rápidos como de costumbre. Esta fue una de las carreras más ajustadas de la temporada en términos de diferencia temporal entre los coches, dado que los pilotos estaban muy próximos entre sí.

Al optar por iniciar la carrera con neumáticos blandos, Charles Leclerc superó rápidamente a Russell, asegurando un provisional primer y segundo puesto para Ferrari. El récord de apariciones del coche de seguridad en Singapur, que es del 100%, se mantuvo debido a un accidente de Logan Sargeant.

Por supuesto, varios pilotos intentaron aprovechar la situación para realizar paradas «gratuitas» en boxes. Sin embargo, el tráfico en el pitlane hizo que Leclerc perdiera un par de posiciones. Lando Norris, muy combativo, logró mantener la compostura y avanzar en la pista. Sainz controló con maestría el ritmo durante toda la carrera, pero no pudo distraerse ni un momento, ya que el resto de los competidores le pisaban los talones.

George Russell y Mercedes estaban especialmente interesados en lograr una victoria en la carrera. Sin embargo, desde el punto de vista estratégico, necesitaban hacer algo distinto para tener una verdadera oportunidad. Y así lo hicieron. Con menos de 20 vueltas por delante, ambos Mercedes aprovecharon a la perfección la oportunidad de entrar a boxes bajo un coche de seguridad virtual para cambiar a neumáticos medios.

A cambio, quedaron detrás de algunos competidores y se estableció una considerable distancia entre ellos y el líder de la carrera. Sin embargo, los neumáticos de Mercedes, que tenían mucho más agarre que los neumáticos duros ya desgastados, les permitieron volar en la pista, mientras que los demás pilotos al frente experimentaban problemas de control. La persecución comenzó y ambos Mercedes hicieron todo lo posible para alcanzar y superar a los pilotos que iban delante.

Un final emocionante

Mercedes se encontraba en una posición inmejorable para lograr una victoria, ya que en pocas vueltas se situaron justo detrás de Sainz y Norris. Aunque Russell y Hamilton eran claramente más rápidos, Sainz y Norris defendieron sus posiciones con maestría. Sin embargo, en la última vuelta, Russell excedió sus límites y chocó con un muro. Lo que podría haber sido una victoria se convirtió en un accidente, y no sumaron puntos.

Fue un gran desencanto para George, pero un domingo estupendo para Ferrari y Sainz, quienes finalmente pusieron fin al dominio de Red Bull y lograron su primera victoria de la temporada. También fue un triunfo para McLaren, con Lando Norris obteniendo el segundo puesto, mientras que Hamilton completó el podio. A pesar de sus esfuerzos, Verstappen finalizó en quinto lugar, quedando cerca de adelantar a Leclerc en la recta final.

Fue una carrera emocionante y llena de acontecimientos. Esto plantea una pregunta: ¿Han mejorado otros equipos lo suficiente para desafiar a Red Bull en los próximos circuitos o fue simplemente un percance puntual? Lo descubriremos la próxima semana en Japón.