La increíble historia de Olazábal: De estar postrado en cama a ganar su segundo Masters
Este 2024 José María Olazábal está de enhorabuena. El vasco volverá a asistir al Masters de Augusta, el torneo que le encumbró como uno de los grandes golfistas españoles y donde acumula dos triunfos. Victorias que en esta edición cumplen 25 y 30 años, respectivamente.
Olazábal será uno de los tres españoles que participe en la edición de este año junto al campeón de 2023, Jon Rahm, y Sergio García, campeón en 2017, aunque difícilmente optará a la victoria final. No obstante, este 2024 será especial por estar más vivas que nunca sus victorias en 1994 y 1999.
Se abren las puertas del cielo
Olazábal entró en el olimpo del golf en 1994, cuando batió a Tom Lehman para levantar su primer grande. Su remontada en el último día se fraguó desde el mismísimo vestuario, cuando descubrió una nota del mismísimo Severiano Ballesteros. ‘Ten paciencia, juega tu juego, que tienes juego más que suficiente para ganar este torneo’, indicaba el mensaje del gran referente español en el mundo del golf.
“Me acuerdo perfectamente de que cuando metí el último putt en el 94, en vez de sentir esa explosión de alegría, tuve una sensación de alivio”, relató el propio Olazábal en numerosas ocasiones. Lo que no esperaba es que la vida le aguardaba un período oscuro cuando una artritis reumatoide le dejó postrado en cama, poniendo en riesgo su carrera deportiva.
Si bien la dolencia en el pie no le impedía jugar al golf, sí le imposibilitaba caminar, algo que los golfistas deben hacer durante largos periodos de tiempo durante los torneos. Por suerte, la intervención de Hans-Wilhelm Müller Wohlfahrt puso fin al calvario de Olazábal y lo devolvió a los campos de golf.
El vizcaíno regresó a la acción y retomó una carrera deportiva plagada de éxitos. Fue integrante en el equipo europeo de la Ryder Cup, pero su redención llegó finalmente en 1999 al enfundarse su segunda chaqueta verde en Augusta.
“Volver a ponerme la chaqueta verde fue algo extraordinario que no me esperaba. Fue un momento, golfísticamente, el mejor de toda mi vida”, apuntó Olazábal en una entrevista en el Diario Vasco, un momento único que atesora con gran cariño.
Salvo sorpresa, el golfista vasco volverá al tapete donde vivió sus días más felices al participar nuevamente en el Masters de Augusta. Como marca la tradición, los campeones pueden competir cada año al tener una invitación de por vida. Le espera un merecido homenaje.
