La temporada (casi) perfecta de Verstappen
La temporada de Fórmula 1 de 2023 ha tenido poca emoción en cuanto al título. La superioridad de Max Verstappen y Red Bull ha sido aplastante y el neerlandés apenas ha tenido oposición para conseguir su tercera corona mundial. Los números así lo reflejan, con ‘Mad Max’ habiendo ganado la friolera de 19 carreras de 22 posibles, un récord absoluto de la mano de un coche casi perfecto que se ha impuesto en 21 de los 22 Grandes Premios de este curso (19 veces con Verstappen y 2 con Pérez). Solo Carlos Sainz y su Ferrari consiguieron romper dicha tendencia, un oasis en un año tiranizado por la escudería de Milton Keynes.
Con un año así, era inevitable que Verstappen superara todas las marcas habidas y por haber, empezando por el número de victorias totales y el mejor porcentaje de triunfos. Nadie antes había logrado alcanzar un ratio de 86,36%, superando el registro de Alberto Ascari de 1952, cuando llegó al 75% de victorias en un mismo año, o el 72,22% de Michael Schumacher de 2004.
Verstappen también es el primer campeón en doblar en puntos al segundo clasificado (Checo Pérez), acabando la temporada con 575 puntos por los 285 del mexicano. Él solito también ha sido capaz de sumar más puntos que cualquier otro equipo, dado que Mercedes, segundo en la general de constructores, ha acumulado un total de 409.
Hitos como el de más vueltas lideradas (1.003 de 1.325 totales – 75,70%) o el estar más kilómetros en cabeza (4.014) ensalzan aún más el pilotaje del ya tricampeón mundial.
El resurgir de Alonso
Dejando de lado a Max y su Red Bull, una de las notas positivas de la temporada ha sido Fernando Alonso. Muchos criticaron su decisión de dejar Alpine para recalar en una formación que apenas rindió en 2022, pero la meteórica mejora de Aston Martin este año ha justificado el riesgo que tomó el español.
Con el monoplaza británico, Alonso ha podido volver a disfrutar al volante y, lo que es más importante, luchar por entrar en el podio. El inicio de curso fue espectacular, con varios podios consecutivos y con el sueño de ganar una carrera planeando en las primeras carreras. De haber estado un poco más fino en la estrategia, Fernando podría haber incluso celebrado su 33º triunfo en Mónaco, algo que no sucedió por los pelos.
Con esta tendencia, se espera que Aston Martin pueda luchar por las carreras el próximo curso. El optimismo reina en la formación verde y Alonso se relame de poder tener un coche capaz de todo en los domingos.
Ferrari, luces y sombras
En 2022 Ferrari tuvo un coche ganador en varios tramos de la temporada, pero este 2023 ha sido un quebradero de cabeza para los italianos. En algunos Grandes Premios el coche ha mostrado una velocidad endiablada, a la altura de Red Bull, mientras que en otros parecía un monoplaza de segunda fila.
La degradación de los neumáticos y la escasa ventaja de rendimiento han sido el talón de Aquiles de un equipo que sigue disparándose tiros al pie con sus estrategias. Pese a todo, Carlos Sainz termina siendo el único piloto que no conduce un Red Bull en poder ganar una carrera, haciendo gala de una madurez y un saber hacer en pista encomiables durante el GP de Singapur.
Por otro lado, la mejoría de McLaren o el potencial que puede volver a mostrar Mercedes el año que viene son algunas de las cosas que dan cierto optimismo de cara a 2024 en pos de tener un campeonato más disputado e igualado. De lo contrario, todo indica que volverá a estar tiranizado por Vestappen y Red Bull.
