“En el mejor de los casos, me queda un año de vida”
Sven-Göran Eriksson hace tiempo que vive lejos de los focos mediáticos. El prolífico entrenador, quien dirigió a varias selecciones como la de Inglaterra y militó en equipos de Suecia, Inglaterra, Italia o Portugal, entre otros, reapareció para desvelar su desgarradora situación. Sufre cáncer y le queda poco para traspasar.
“Sé, aproximadamente, que en el mejor de los casos me queda un año de vida; y en el peor, menos”, explicó en el canal sueco ‘P1’. “Pero puedes engañar a tu cerebro y ver lo positivo de las cosas. No te dejes llevar por la adversidad, porque ésta es, por supuesto, la mayor adversidad, pero hay que hacer algo bueno con ello. Todo el mundo entiende que tengo una enfermedad que no es buena. Todo el mundo supone que es cáncer, y lo es. Pero tengo que luchar tanto como pueda”, resaltó Eriksson.
El sueco hace tiempo que sabe de su diagnóstico. Un día se desplomó en casa y decidió ir al hospital. El día antes había corrido cinco kilómetros y pensaba que podía tener alguna relación, sin embargo se le descubrió que había sufrido un derrame cerebral y que tenía cáncer de páncreas.
Eriksson ha ido frenando el avance de la enfermedad, pero según sus palabras está perdiendo la batalla. Durante su carrera deportiva protagonizó varios hitos, como llevar el Göteborg a la Copa de la UEFA en 1982, a la Lazio a ganar la Serie A en el 2000 y la Recopa de Europa en 1999. De 2001 a 2006 fue seleccionador de Inglaterra antes de recalar en las filas del Manchester City.