La Euroliga nos regala una semana extra de emoción antes de la F4

Si algo estaba claro antes de arrancar los Playoffs de la Euroliga, es que teniendo en cuenta como había ido la temporada, donde todos los equipos han demostrado ser capaces de ganar contra todo el mundo y en cualquier cancha, podía pasar absolutamente de todo en cada serie y que el papel de favoritos no iba a existir para prácticamente nadie excepto para el Real Madrid que actualmente, y tal y como ha demostrado en su eliminatoria, está un paso por encima de Baskonia.

Los de Chus Mateo son el único equipo que ha ganado los tres primeros partidos, y, por lo tanto, con un 3-0 a su favor ya tiene billete para estar en la Final Four de Berlín. Sin piedad, y demostrando porque la gente le da como favorito para ganar el título, los blancos han vuelto a reencontrarse con su mejor versión en una serie que les debe servir para seguir creciendo y llegar con un extra de confianza y motivación al Mercedes Benz Arena.

El resto de eliminatorias, en cambio, están empatadas a dos y todo se decidirá a un cara o cruz en el quinto y definitivo partido. El Barça fue capaz de ganar su primer partido en Grecia para afrontar con un punto más de tranquilidad el cuarto partido de la serie. Los azulgranas, que no compitieron en ningún momento el encuentro, vieron como los de Bartzokas pasaron sin piedad por encima. Una imagen mala, muy mala y que este miércoles en el Palau debe cambiar radicalmente si los de Grimau quieren volver a estar entre los cuatro mejores de Europa.

Quién lo tuvo cerca fue Maccabi. Los de Kattash que dominaban 2-1 la serie tuvieron un cuarto partido en casa, donde dominaron durante muchos minutos, para cerrar la serie. Pero Panathinaikos, con un Ataman a los mandos que ya dijo tras el primer partido de Playoffs que abandonaría el club si no lograba meterse en la F4, logró una remontada histórica en los últimos minutos del cuarto partido para dar un golpe sobre la mesa y demostrar que el buen trabajo de todo el año no era casualidad.

Y Fenerbahçe también vio de cerca cerrar su eliminatoria tras la victoria en el tercer partido. Los de Jasikevicius tuvieron el primer match ball en su casa en un partido muy igualado y que se acabó decidiendo por detalles. El encuentro, que terminó con enfrenamiento entre los jugadores del conjunto turco y los jugadores de Mónaco, volvió a evidenciar lo igualada que es la Euroliga y lo complicado que es meterse en Final Four.

Esta semana, saldremos de dudas y empezaremos a diseñar el camino hacia el título. El Barça recibirá el miércoles a las 21:00h a Olympiacos en el Palau, Mónaco abrirá las puertas de su casa el mismo miércoles, pero a las 19:00h para verse las caras con Fenerbahçe, y el martes a las 20:45h se disputará el Panathinaikos-Maccabi.