Panathinaikos cumplió con lo previsto y eliminó a Fenerbahçe para meterse en una nueva final europea después de 12 años sin estar presente en una Final Four. Con Ataman al mondo, los griegos lograron un triunfo que les permitirá pelear el domingo por su séptima corona europea.
Tras el partido, los jugadores de acercaron a la esquina donde se encontraban los aficionados de Panathinaikos para celebrar con ellos el triunfo. Incansables durante todo el encuentro, los del trébol crearon del Uber Arena un pequeño OAKA.