Facundo Campazzo penetrando a canasta mientras es defendido por Willy Hernangomez / Fuente: Imago.
Facundo Campazzo penetrando a canasta mientras es defendido por Willy Hernangomez / Fuente: Imago.

Un gran Barça se lleva el clásico ante el Real Madrid

Baloncesto Alex Carrasco abril 7, 2024

Un Palau Blaugrana absolutamente lleno e incansable durante todo el partido, estuvo tan metido como el equipo en el encuentro desde el minuto uno. Un factor clave para un Barça que lleva toda la temporada demostrando que en casa se siente extremadamente fuerte cuando juega con su gente, y que tras la victoria ante el Real Madrid manda un claro aviso de que en este tramo final de temporada va a luchar por ganarlo absolutamente todo.

El partido arrancaba con ambos equipos disparando con fuerza, pero los azulgranas, que empezaron a apretar en defensa, lograban parar a un Madrid que en ataque se estancó mientras el conjunto catalán empezaba a volar sobre la pista. Dos triples seguidos de Ricky, que cuajó un grandísimo partido y cambió el rumbo del periodo cuando entró a cancha, y Laprovittola que salió al partido con la muñeca especialmente caliente, ponían un 16-7 que obligaba a Chus Mateo a pedir tiempo muerto a falta de tres minutos para el final del primer cuarto.

Poca reacción blanca hubo, y es que el parcial continuó creciendo y los primeros diez minutos de partido terminaban con un 27-11 a favor de un Barça que jugó uno de los mejores ratos de toda la temporada. Ricky seguía marcando el ritmo del partido al inicio del segundo cuarto, y el Madrid trataba de encontrar, sin demasiado acierto, la canasta rival. Parecía que los blancos volvían a entrar en partido poco antes de llegar al ecuador de la primera mitad, pero un triple de Abrines desde la esquina, volvía a obligar al técnico madridista a parar el encuentro.

El Barça se ponía +19, y Jan Vesely volaba para reventar el aro en el primer ataque azulgrana tras el tiempo muerto para poner al equipo +21, la que sería la máxima diferencia en todo el partido. El Madrid despertó a tiempo y volvió a entrar en partido. Un parcial de 2 a 14 acercaba a los de Chus Mateo en el marcador. Al final de la primera mitad, los de Grimau se iban mandando por 12 puntos de diferencia, pero absolutamente nada estaba todavía decidido.

Y es que una vez el Real Madrid volvió a demostrar que nunca se le puede dar por muerto. Los blancos salieron con ganas de todo tras el descanso y lograron rebajar la desventaja a solo siete puntos en poco más de dos minutos de tercer cuarto. El Barça no se vino abajo y siguió peleando en un tercer cuarto repleto de intercambios entre los dos equipos, pero con un Madrid que seguía creciendo. Un triple de Lull a falta de tres minutos para el final del tercer cuarto colocaba a los blancos solo cuatro puntos por debajo, y la sensación es que en ese momento arrancaba un nuevo partido que había que saber gestionar.

Los últimos diez minutos de partido arrancaban con el Barça +6 en el marcado, 64-58 mandaba el conjunto catalán que sabía que iba a tener que sufrir hasta el final si quería llevarse el partido. Hezonja ponía al Madrid a tres con un triple marca de la casa, y Deck en un contraataque madridista ponía al equipo de Chus Mateo solo uno abajo.

El run run empezaba a sonar en el Palau Blaugrana, el Madrid apretaba y se acercaba, pero un parcial de 4-0 permitía a los de Grimau respirar un poco. Sin Tavares en pista, eliminado por faltas, el Barça consiguió ir poco a poco alejándose en el marcador gracias a triplazo y una penetración del MVP Laprovittola que a falta de minuto y medio para el final dejaba el partido en bandeja para el Barcelona que terminó ganando 85-79.


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